Café George Curaçao
Un refugio de inspiración francesa con un encanto natural
Café George Curacao es diferente a cualquier otro lugar de la isla. No se encuentra en las concurridas calles de Willemstad, ni en la playa, y desde luego no pretende ser un club de playa. Es un pequeño mundo en sí mismo. Íntimo, soleado y con un encanto natural, cuenta con un frondoso patio al aire libre que recuerda a un jardín francés acariciado por la brisa de Curacao.
El diseño rinde homenaje a la Riviera bohemia de los años 50: texturas naturales, suaves tejidos de lino, ratán, tonos salvia y terracota. Su diseño abierto permite que el interior fluya a la perfección hacia el exterior, al igual que el vino. Es el lugar donde los lugareños reclaman su mesa favorita, donde los viajeros entran y nunca quieren marcharse, y donde las parejas brindan bajo las estrellas.
En el menú encontrará los clásicos más apreciados de George: el steak tartar, la ensalada niçoise y el emblemático scroppino, que de alguna manera sabe aún mejor en los trópicos. Todo ello acompañado de vino fresco, buena música y el toque justo de actitud.
Qué esperar
- Un tranquilo patio de inspiración francesa alejado de las multitudes.
- Platos clásicos de George como el steak tartar y la ensalada niçoise.
- Diseño aireado al aire libre con detalles de estilo Riviera.
- Ideal para almuerzos largos, copas al atardecer o una velada romántica.
- Un lugar de reunión favorito tanto para los lugareños como para los visitantes de la isla.
Consejo
Reserve con antelación si quiere los mejores asientos del jardín, especialmente durante la puesta de sol.
